Thursday, March 15, 2018

La confianza mató al Oso por José Sánchez


      Cuando era niño vivía en México. Donde vivía yo tenía un perro y una perra, tuvieron perritos, regalamos todos excepto uno al cual nombramos ‘Oso’ por el color de su pelaje y porque estaba gordo. Lo tuvimos con nosotros por un buen tiempo, pero mi familia había decidido mudarse a Estados Unidos y nos íbamos a ir en dos semanas. Entonces decidimos regalar a Oso, como si se tratara de cualquier objeto, a uno de los vecinos que era dueño de una tiendita y nos había dicho que lo quería.
     Yo sentía un gran cariño por Oso porque yo lo vi crecer desde que era cachorro. Cada vez que lo veía me sacaba una sonrisa y el haberlo regalado me dolió mucho porque ya no lo veía diari. Fue algo que no me gustó hacer, pero lo hice por el bien de Oso, y no quería que se quedara solo sin nadie que lo cuidara.
     Cuando se lo dimos, todavía faltaba una semana para irnos. Durante la semana que faltaba fui a comprar unas Sabritas a su tienda chica que solo vendía algunos abarrotes, que estaba pegada una parte de su casa, la cual era muy grande que tenía un patio grande. Le pregunté por Oso y me dijo que lo pasara a ver. Al entrar vi que lo trataban bien porque se veía muy gordo y feliz. Durante esa misma semana fui a comprar una soda y le pregunté por Oso y me dijo que había muerto envenenado.
     Al enterarme me sentí muy triste y enojado con el vecino porque lo descuidó. Reflexioné y actué como si nada hubiese pasado porque sabía que no era culpa de el vecino sino la mía por haberle regalado a mi Oso. Tal vez si no lo hubiese regalado habría vivido más tiempo.
     En conclusión, al final me di cuenta que confiarle algo que en verdad apreciaba yo a alguien más no fue una buena idea porque puede pasar cualquier cosa y puedo perder algo o a alguien que deverdad quiero.

5 comments:

  1. me gusto mucho tu historia.

    ReplyDelete
  2. ¿Cuantos años tenía Oso?

    ReplyDelete
  3. This comment has been removed by the author.

    ReplyDelete
  4. Era una buena historia y lastima por tu oso que en paz descanse.

    ReplyDelete
  5. pobre oso y como se enveneno?

    ReplyDelete